Las mismas incluyen el uso de repelentes, especialmente en las primeras horas de la mañana y del atardecer en las que el mosquito tiene mayor actividad. También se sugiere usar ropa de colores claros que, de ser posible, cubra brazos y piernas, utilizar espirales en espacios al aire libre y tabletas en ambientes interiores, y proteger camas, cunas y cochecitos con tul o tela mosquitera.
Ante la presencia de síntomas compatibles con la enfermedad, se recuerda también que se debe consultar inmediatamente al sistema de salud, sin automedicarse, mientras que la cartera sanitaria nacional recomienda también continuar con la eliminación de posibles criaderos y es fundamental descartar objetos en desuso que puedan acumular agua, dar vuelta, tapar o cambiar el agua de aquellos que no puedan eliminarse y destapar canaletas o desagües.
Además, aquellas personas que se vayan de viaje o dejen sus viviendas por varios días, deben tener especial cuidado con estas medidas, para evitar que durante su ausencia se acumule agua que puedan convertirse en criaderos del mosquito.
Actualmente, 16 países del continente registran circulación de dengue y Brasil concentra, por amplio margen, el mayor número absoluto de casos, mientras que otros con altas notificaciones acumuladas son México, Colombia, Guatemala, Perú, Honduras, Costa Rica y Ecuador.
En relación con los serotipos, Brasil, Costa Rica, El Salvador, México, Panamá y Puerto Rico presentan circulación simultánea de los cuatro serotipos del dengue, mientras que Bolivia, Perú y Paraguay muestran circulación de múltiples serotipos, destacándose la presencia de DENV-3 en los tres países.
En Argentina se registró circulación autóctona de los serotipos DENV-1 y DENV-2 en 2025. La detección de dos casos de DENV-3 en personas con antecedente de viaje en las últimas semanas evidencia la necesidad de mantener una vigilancia oportuna, que incluye la serotipificación y el uso de métodos de diagnóstico directo.